El Marqués de la perversión. Imposible saber qué parte del proceso de civilización de una persona no dio en la tecla con él. Imposible saber qué visión tan diferente tenía del mundo, de su mundo, de todos los demás; qué valores ponía en qué orden, cuál era el principio más fundamental que regía su mente.
¿Y si fuese cierto que era puro libertinaje? Puramente dejar correr lo que un espíritu humano desprejuiciado desea más fogosamente. ¿Sería realmente un trastorno el ver el placer más puro en el sufrimiento de otro? ¿O sería la más espontánea humanidad manifestada en un llamado enfermo? Y cabe preguntar, ¿es la locura un estado excepcional en la mente, o se llama así a la falta de espontaneidad, de naturalidad en un humano?
Es difícil pensar en el sadismo como un estado natural. Tal vez fuese resultado del resentimiento hacia un aspecto del mundo, manifestado en la tortura a aquello imperceptiblemente relacionado con el factor que alguna vez hizo mal.
Ni el esfuerzo máximo de toda la humanidad, considerada ésta como aquellas mujeres y hombres que fueron y son, alcanzaría para comprender totalmente la enorme, desmesurada, inconcebiblemente compleja mente humana.
¿Y si fuese cierto que era puro libertinaje? Puramente dejar correr lo que un espíritu humano desprejuiciado desea más fogosamente. ¿Sería realmente un trastorno el ver el placer más puro en el sufrimiento de otro? ¿O sería la más espontánea humanidad manifestada en un llamado enfermo? Y cabe preguntar, ¿es la locura un estado excepcional en la mente, o se llama así a la falta de espontaneidad, de naturalidad en un humano?
Es difícil pensar en el sadismo como un estado natural. Tal vez fuese resultado del resentimiento hacia un aspecto del mundo, manifestado en la tortura a aquello imperceptiblemente relacionado con el factor que alguna vez hizo mal.
Ni el esfuerzo máximo de toda la humanidad, considerada ésta como aquellas mujeres y hombres que fueron y son, alcanzaría para comprender totalmente la enorme, desmesurada, inconcebiblemente compleja mente humana.
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