Decime la verdad decímela, decime la verdad decime TU verdad quiero saber la verdad decime, vamos, decime la verdad.

Una bonita persona puede cambiarte la vida una bonita persona puede arruinarte la vida una bonita persona puede salvarte la vida.
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Pensante, ¿en qué piensas ?
Quiero descubrir la verdad de todo.
Dime de qué manera puedo ayudarte.
Dime tu verdad.
No sé mi verdad, no sé qué significa verdad.
Verdad es todo aquello que no se ve opacado por la mentira.
No comprendo.
La verdad es lo que no necesita engaños luego de ser dicha.
No comprendo, pensante. No comprendo. Si yo te dijera que todo lo que digo no es verdad, ¿qué entenderías?
Que no debo considerar eso, ya que, puesto que todo lo que dices no es verdad, eso tampoco lo es.
En ese caso estarías respetando que lo que dije no es verdad, y para eso tendrías que creer en la veracidad de esas palabras.
Es un círculo vicioso. Es un juego de palabras. Es un engaño. Nada tiene que ver con la verdad.
Pues bien, si la verdad no necesita de engaños, pero a su vez es verdad que fue dicho, explícame en qué punto de lo que dije se halló la verdad.
En que lo dijiste.
Pero no es verdad lo que dije.
Pero lo dijiste.
Pero para expresar mi idea me basé en mezclar la verdad y un engaño, de otra forma no hubieras entendido el concepto.
Es por eso que dije que nada se relaciona esa frase con la verdad.
Pero fue dicha.
Pues claro.
Y es verdad que fue dicha.
Pues claro.
Pero a su vez puede no ser cierta.
Pues claro, como todo puede no ser cierto.
Y en ese caso, ¿cuándo se sabe que se está en presencia de la verdad verdadera y no de una verdad con probabilidad de estar infectada de mentira?
No se sabe nunca.
Y si ya sabes que es imposible conocer entonces la verdad, ¿por qué la sigues buscando?
Porque no me conformo con no lograrlo.
Pero es imposible.
Nada es imposible.
¿Nada es imposible?
Absolutamente.
¿Es eso verdad?